martes, 28 de mayo de 2019

Viejitos, divino, tesoro

El cuento de las comadrejas (Campanella Juan José, 2019)


La previa


Campanella es un gran director de nuestro cine, su obra acuna títulos tan resonantes y premiados como El secreto de sus ojos (ganadora del oscar a mejor película extranjera) o Metegol, lo que es lamentable es su postura política partidaria, su apoyo al gobierno de cambiemos y ahora su declaración de neutralidad frente a las próximas elecciones.



La historia


Se trata de una remake de Los muchachos de antes no usaban arsénico (Martínez Suárez, 1976) una película maravillosa actuada por enormes figuras de la historia del cine nacional que en la década del 70 son septuagenarios y se ríen de sus aventuras en proyectos cinematográficos de juventud. Martín (Mario Soficci) es el director, Norberto, Narciso Ibañez Menta (es el guionista), Pedro, Arturo García Burh es el actor y Mecha Ortiz, la diva, Mara Ordaz, mientras que Bárbara Mujica es la jóven que tiene un proyecto inmobiliario. José Martínez Suárez elige este título en homenaje a un film fundacional del cine argentino de Manuel Romero Los Muchachos de antes no usaban gomina donde Mecha Ortiz es la rubia Mireya, hermosa estrella, que nunca deja de brillar en la pantalla y que remite al universo poético del tango.




El relato


Campanella hace una nueva versión haciendo un homenaje a su maestro Martínez Suárez y a Graciela Borges una estrella de nuestro cine que florece a partir de los 60 y encarna a la nueva Mara Ordaz, es muy lindo el tributo que se rinde a Graciela, por los guiños cuando se la reconoce y por el enganchado de films que se proyectan, sin repetir y sin soplar puedo enumerar: El jefe (Ayala, 1959), Piel de verano (Torre Nilsson,1961), La zafra (Demare, 1959), Circe (Antín, 1964) en una escena magnífica en que se proyecta sobre la cara de la actriz su mismo bello rostro, pero de juventud.




El elenco se completa otra vez con grandes figuras Oscar Martínez es Martín, Luis Brandoni encarna a Pedro y Marcos Mundstock a Norberto, los jóvenes villanos son Francisco Gourmand interpretado por Nicolás Francella que en algunos pasajes entrega una actuación con toques de su padre y Bárbara Otamendi es Clara Lago la actriz española a través de la cual se realiza la coproducción, y entrega una villana que está muy bien.


El desarrollo del relato es encantador, la locación cumple con la consigna de una vieja casona que encierra un misterio muy fácil para pescar a cualquier macrista distraído, el negocio inmobiliario. El tema central se ancla en  la venta o no del inmueble y todos los hilos que se empiezan a mover entre las partes interesadas.


El juego que desempeña Graciela Borges en el personaje de Mara Ordaz es un homenaje al cine y al concepto de estrella, recuerda también Sunset Boulevard (Wyler,1950) la figura de la estrella que pasa de moda pero sigue reviviendo en privado su vieja gloria con algún seguidor fanático, generalmente su propio marido. Es soberbia y hermosa y tiene sangre de celuloide, los chistes remiten al mundo cinéfilo local, como cuando Martín va a la mega inmobiliaria para ver a Bárbara, se tiene que registrar en recepción y declara como nombre Mario Soficci de la Productora Del Carril Soficci Tinayre.


La metáfora con las comadrejas, ratas, y alimañas muestra las aristas de la condición humana, la avaricia misma propone un desafío entre los viejos y nuevos métodos a la hora de lograr un objetivo.


La veo o no la veo
Sin dudas, pese a que el director diga tantas giladas, no deben perderse este peliculón.


Algunos datos para curiosos




Mecha Ortiz es una actriz del cine clásico que protagonizó de lo mejor del cine nacional, Los muchachos de antes no usaban gomina (Romero, 1937), Mujeres que trabajan (Romero, 1938), Safo, historia de una pasión (Christensen,1943)  






Graciela Borges actriz del cine de vanguardia nacional, emerge en los 60 con los directores rupturistas como Torre Nilsson, Fernando Ayala y el gran Leonardo Favio. Tiene una enorme carrera no se pierdan sus films.




Mario Soficci director que realizó grandes títulos y se atrevió a transitar distintos géneros, arranca como pionero con una enorme producción como fue Prisioneros de la Tierra. Luego realiza melodrama clásico, La cabalgata del circo y La pródiga, son ejemplos. Incurre también en el género fantástico con El misterioso caso del hombre y la bestia una versión local de Dr. Jekyll y Mr. Hyde que además protagoniza, y por si esto fuera poco, en los años 60 realiza Rosaura a las diez haciendo ruptura en la formalidad del relato.




Narciso Ibáñez Menta es el referente de la ficción de terror del cine y la televisión local, recordado por el programa de episodios televisivos El Pulpo Negro, protagonizó enormes películas como La bestia debe morir de Vignoli Barreto.




Arturo García Burh actor del cine clásico que trabajó en los primeros films del sonoro industrial como El inglés de los güesos de Christensen, en la década del 60 también dirigió películas y como actor fue premiado por su participación en la inolvidable Los isleros junto a Tita Merello.



Bárbara Mugica fue una grande del cine nacional, hecha de cine, hija de la actriz Alba Mugica, contemporánea de Graciela Borges y Elsa Daniel algunas de las películas que protagonizó y recordamos especialmente son: La casa del Angel (Torre Nilsson 1957) Las ratas, (Savlasky,1962) y Gracias por el fuego (Renán, 1984)



José Martínez Suárez es un director que trabajó desde muy joven en los estudios Lumiton cuando el cine se estaba inventando. Es el hermano de Chiqui y Goldi Legran, desde hace más de diez años dirige el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata y aunque está grande tiene una memoria excelente con anécdotas para compartir, entre sus títulos más importantes figuran Los chantas y Los muchachos de antes no usaban arsénico.

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