sábado, 2 de noviembre de 2019

Solemne balacera

Pistolero (Garavagno, 2019)


La previa


Es muy esperado por nosotros el cine de género nacional, es porque nos gusta mucho y desde la década ganada kirchnerista se había podido retomar un nivel de producción que empezaba a igualar buenas épocas, con inversión producción y nombres prometedores. De la mano del INCAA y la TDA se armaron varias movidas donde vimos producciones de BOIKOT y donde Galvagno ha sido productor y director en distintos formatos.




La historia


Un bandido rural, Isidoro Mendoza y su banda saquean financieras y joyerías en el interior de Mendoza a finales de los 60s, cuenta la leyenda que siempre deja algo para los pobres. El comisario de la zona hace tiempo que lo busca y está tras su sombra.


El relato


La historia y los personajes retratados son atractivos los momentos de incertidumbre pesan, las actuaciones son buenas. Lautaro Delgado que viene batallando en varios bodrios del cine pogre al fin se desquita a los tiros con mucha personalidad. María Abadi está impecable ha hecho mucha pantalla chica en estos tiempo y se merece protagónicos de esta talla. Juan Palomino y su proceso de charlesbronsonización nunca defrauda. Mención especial para Maravilla Martínez que desempeña un papel excelente y sorprendente porque no era conocido en este rubro. No podemos dejar de nombrar la maravillosa actuación de Diego Cremonesi villano y hablando en italiano muy bien.




El problema del relato es que Galvagno no terminó de decidir para quién quería contar esta historia. No puede ser que se pretenda que el espectador haga un gran esfuerzo para comprender la historia porque el director quiere aglutinar todas sus grandes ideas en un solo guión,  es importante elegir qué y a quién se le va a contar la historia y si hay dudas recurrir al género como matriz para ajustar las coordenadas que se le envían al espectador. Si se mezclan escenas de un costumbrismo inesperado cuando la publicidad y el afiche presentan un western, si se presentan personajes complejos como el comisario representado por Juan Palomino y el personaje hacia el final se abandona en lugar de cerrar el arco de transformación solo se aporta desconcierto.




Tal vez el director se vió condicionado por su estreno en el marco del BAFICI, es una lástima, retomando la reflexión realizada con el film Iniciales, es importante que los realizadores se ubiquen en el campo de producción de matrices que tienen historia y no en querer volcar sus grandes ideas todas juntas, la insistencia en el  tema es porque se corre el riesgo de que se considere la producción cinematográfica argentina como el gusto o capricho de los que llegan a producir films y el arte cinematográfico es otra cosa. Es un hecho industrial y colectivo que debe considerar al público, se cual sea el elegido, parte esencial de la construcción del film.

La veo o la veo
Se hace difícil de recomendar, grandes actuaciones, balaceras buenísimas y una historia que se hace densa.