martes, 31 de diciembre de 2019

Gente encantadora

Entre secretos y navajas (Jonhson,2019)


La previa


Rian Jonhson recientemente entronizado como mandamás creativo de las futuras entregas del universo Star Wars, se hace un ratito para amontonar estrellas y despacharse con una película de un género algo olvidado por Hollywood pero siempre vigente en Inglaterra, el who do it? (¿quien lo hizo?).  
Siempre son tentadores los filmes al estilo Agatha Christie, un crimen, un asesino suelto entre los protagonistas que de alguna u otra forma dejará pistas, es ahí donde nos calzamos el impermeable y la libreta o grabador, para tomar todos los indicios que nos lleven a resolver el caso, o al menos acercarnos lo más posible. 





La historia


La misteriosa muerte de Mr. Thrombey luego de una reunión de toda su familia es el inicio de una investigación y una gran disputa por la herencia.


Mr. Thrombey (interpretado por Christopher Plummer) ha muerto, y como todo pater familia deja tras su partida un testamento,  esto es así en la ley estadounidense y viene como anillo al dedo para historias de misterio. En otros países como Argentina por ejemplo, hay ley de sucesión y no puede un testamento anular la herencia que corresponde a los descendientes. 


El investigador de turno, el teniente Elliot encarnado por Lakeit Stanfield, va ir entrevistando a cada miembro de la familia para indagar acerca de los hechos acontecidos en la noche del cumpleaños del anfitrión que resultó ser su última velada.  Desde las sombras y tocando algunas teclas del piano vemos al típico detective con su acento extraño, sus clichés y con mucha parsimonia para realizar alguna pregunta más, realizando este rol nada menos que nuestro querido James Bond, el duro e inoxidable Daniel Craig como Benoit Blanc.
Craig interpretando al excéntrico investigador, referencia directa a Hércules Poirot el legendario personaje de Agatha Christie, da curso a la parte más pura del género, repleta de guiños y referencias. Algo patético en su impostura logra resolver el caso aplicando su propio método de observar los hechos como la trayectoria de un cuerpo que cae, teoría que explica en uno de los pasajes más memorables de la película.  




El elenco continúa con grandes figuras y resulta divertido apreciarlos en un ambiente cuasi claustrofóbico, Toni Collette como la viuda Joni Thrombey junto a su hija Meg (Katherine Langford) arman una dupla que sabe conseguir piedad de los parientes, salvo del viejo que parece tenerlas muy caladas. Jamie Lee Curtis es Linda, la hermana mayor, que está casada con Richard Drysdale, interpretado nada menos que por Don Johnson galán ya maduro pero impecable, son esos actores que uno identifica tanto con una serie (Miami Vice) que es difícil salirse, resulta que son una pareja intachable, el tema es que su hijo Ramson (Chris Evans, sí, el capitán américa)  es un poco, la oveja negra de la familia. En esta línea ,está bueno que actores que están ligados a su rol de megasagas puedan salirse un poco del molde. 
Para cerrar el círculo familiar Michael Shannon un actor que que tiene cara de villano y es difícil verlo en roles de lo cotidiano o mundano, compone un papel excelente como el heredero de la imprenta que es la marca del clan Thromley. 


El único personaje que no pertenece a la familia es Marta Cabrera (Ana de Armas), la enfermera latina que trabaja cuidando al Sr. Thrombey. La actriz cubana viene pisando fuerte en Hollywood y este año dará su salto definitivo al estrellato como chica Bond, acompañando a Daniel Craig en su última vez como el icónico espía. A través del personaje de Marta se pone toda la xenofobia y prejuicios al asador, al punto de jugar con el hecho de considerar a Latinoamérica un todo idéntico, evocando su nacionalidad a cinco países distintos. Luego la cuestión de ser alguien que no pertenece al clan y que tiene todos los números del sentido común más racista para activar todo tipo sospecha sobre sí.


Ana de Armas  logra estar muy bien a la altura del personaje soportando gran parte de la acción dramática solo con la expresividad de su rostro. Los enigmas funcionan, todos sospechan de todos aunque es más fácil siempre acusar a uno, una, en esta ocasión, las miserias afloran y todo parece llegar a un puerto para dar luego una vuelta de rosca muy bien lograda. 
Mención especial para tres apartados técnicos de la película que se integran armoniosamente a la trama lo que los hace pasar medio inadvertidos pero que son muy destacables. La ambientación, la casa Thrombey es un abarrotado delirio, la fotografía, siempre climática y ajustada y por sobre todas las cosa el montaje, veloz, ingenioso y maravillosamente construido. Si bien para mucho puede ser una película menor en estos rubros no debería faltar en ninguna terna de premios.      


La veo o no la veo


Señoras y señores, tomen sus libretas o grabadores visualicen bien la escena del crimen y luego nos cuentan, nos gana el corazón un aire al  querido detective Columbo que impregna la película, si te van las pelis de investigación y pistas no te la pierdas.

domingo, 29 de diciembre de 2019

Alta traición


El irlandés (Scorsese, 2019)


La previa


Uno de los estrenos más esperados del año llega directo a nuestros televisores y dispositivos, los tiempos cambian amigos. En otras ocasiones hemos discutido los cambios, controversias y chicanas que han presentado los distintos actores de la  industria respecto al estreno por streaming particularmente en febrero de este año cuando se estrenó Roma de Alfonso Cuarón. Al igual que con la película mexicana luego de diferentes debates se llegó al acuerdo del estreno en un espectro reducido de salas fuera de las cadenas más grandes y luego si a través de  Netflix la casa productora del film.




La historia


Los hechos que rodean la muerte y desaparición de Jimmy Hoffa, sindicalista camionero de los años 60 en Estados Unidos.


El despliegue formal del film es maravilloso, desde la voz over de Frank (Robert De Niro) en el geriátrico donde reside que realiza un pase de extradiegética a diegética con el personaje mirándonos a los ojos y convirtiéndonos desde el primer momento en los confidentes de su historia, los únicos, podemos aventurar que este formidable  plano de apertura se estudiará en escuelas de cine durante años y se le dedicaran no pocos artículos de análisis en libros y tesis. La película arranca a ese y nivel y después Scorsese nos tira 50 años de oficio encima, los encuadres clásicos pero no por eso oxidados de hombre al volante, referencia obligada a Taxi Driver (Scorsese,1974) anticipan los no pocos auto homenajes que el director desparrama por el film.

Son dos las relaciones de Frank que trazan la película: su relación con Jimmy Hoffa (Al Pacino) y Russell Bufalino (Joe Pesci) Se trata de tres actores enormes, lo que molesta un poco es el efecto de rejuvenecimiento que se aplicó sobre todo en De Niro que con los ojos muy celestes y la piel naranja parece medio extraterrestre, luego el efecto es raro, ya que son caras jóvenes pero cuerpos con movimientos de gente mayor. Son actores muy conocidos que han trabajado con este director, ese empeño por no contratar actores que realicen sus escenas de juventud se ve un poco extremo. Se entiende la voluntad de desarrollar una nueva tecnología, pero los resultados no son aún satisfactorios y le generaron un encarecimiento sideral a la cinta (costó más de 100 millones de dólares) y no pocos retrasos. Los amantes de las películas de cabalgata, o biopics como gustan llamarlas ahora, valoramos el arte del casting de actores y actrices parecidos para representar distintas edades de un mismo personaje. Seguro Robert De Niro concuerda con nosotros. 





La trama de lealtades y traiciones recuerda a títulos anteriores del autor Casino, Buenos Muchachos incluso con los mismos actores. La historia de Jimmy Hoffa, el líder sindical camionero, retrata los años 60 en Estados Unidos, y juega con las posiciones que tomaron distintos sectores, entre ellos el sindicato de camioneros frente al asesinato de John F. Kennedy, presidente de EEUU.


Entendemos que la clave de las razones del personaje para actuar como actúa esta en una pequeña escena que no suele ser tenida en cuenta en la mayoría de los análisis. La escena en que Frank ejecuta eficientemente un grupo de soldados nazis luego de obligarlos a cavar su propia fosa. Sin ningún amago de cuestionamiento o reflexión, simplemente porque se lo ordenaron. Frank Sheeran es ante todo un soldado, y esa es tal vez la clave de todo su accionar, se trata de un ser perfectamente preparado para obedecer, trazando un paralelismo se puede pensar en The hurt Locker (Bigelow,2008)  un film que ganó muchos menciones tratando un tema constante para la sociedad estadounidense: la guerra. En dicho film el protagonista vuelve a su hogar, luego de estar en Irak con la tarea específica de desarmar artefactos explosivos, es tal su nivel de alienación que a su retorno no puede adaptarse a su familia y termina retornando a la vida de soldado, no por una decisión, sino por una especie de condena.

Volviendo a Frank, su caso es de idéntica alienación aunque no en solitario, rodeado de distintas relaciones de poder, no podrá escapar a su carácter de obediente, ni siquiera por amor. Lo que Frank sufre es un tironeo por su obediencia no por su lealtad. Russell lo comprende perfectamente y por eso sabe que la presión y la firmeza son las que inclinaran la balanza y no la afectividad. Por eso el viaje, las amenazas veladas y el acompañamiento y espera hasta el avión. Hoffa confía en Frank, se sabe querido por este y se siente a salvo por ello, no sospecha de él ni en el segundo final. Frank actúa finalmente de la única forma que era capaz, como un soldado, y esto es lo que lo destroza y lo condena a ese purgatorio sin fin que es su vejez.




Esta reseña no comparte el planteo de género que sí abordan otras, a partir  del derrumbe de masculinidades, planteado por Lena Woodhouse en un muy interesante y celebrado hilo de twitter. En él la autora trabaja la idea sobre la atracción y amor homosexual entre los protagonistas del que cabe destacar la sesuda búsqueda escena por escena de indicios formales de esta tesis. Si recomendamos enfáticamente el análisis que hace sobre el personaje de Peggy la hija de Frank con el cual coincidimos completamente.


La veo o no la veo


Definitivamente El Irlandés pasará a la historia por muchos motivos. Si no media ninguna triquiñuela será una de las grandes ganadoras de la temporada de premios, es una película (una de las últimas) de uno de los grandes directores de la historia del cine y además es pionera en dos debates sustanciales para el futuro de las películas, el formato de producción y exhibición y la utilización de CGI para manipular la edad de los actores o traer “a la vida” actores fallecidos. Y si todo esto no alcanzara es además un gran film. No hay excusas para no dedicarle una escasas 3 horas 40 de nuestro tiempo.  

lunes, 9 de diciembre de 2019

Los olvidados

Guasón (Todd Phillips, 2019)




La previa
Se han escuchado desde adolescentes hasta gente mayor, y todos aquellos que generalmente no van al cine ni les interesa demasiado, hablar maravillas del film o de la actuación de Joaquín Phoenix, hasta recomendando su visionado como una pieza imperdible. Incluso, muchos que nunca van al cine han comentado haber sentido necesidad de no perdérsela, algo insólito en tiempos donde la tendencia es cada vez mayor hacia los productos de la pantalla chica y el streaming. 
En EEUU para el estreno hubo medidas de seguridad para que ningún asistente al cine lleve máscaras e inicie una masacre. 
Aquí nuestra reseña de la película más promocionada, inflada y comentada del año, que ganó el León de Oro a Mejor Película en el Festival de Cine de Venecia.


La historia
Una serie de sucesos desmoronan la ya difícil vida de Arthur Fleck, quien termina convirtiéndose en un criminal. Una historia trágica y realista sobre el origen del Guasón.


El relato
¿Quién le da un arma a un loco?
El relato cuenta cómo una persona en estado psiquiátrico sin tratamiento puede convertirse en un asesino. Arthur Fleck es una víctima antes de convertirse en el victimario que aterroriza a Gotham. En los orígenes, el Guasón es un enfermo mental, que padece alucinaciones y un trastorno de risa nerviosa, que le dificulta la respiración y muchas veces provoca el desquite de quien se siente aludido por una carcajada inapropiada. Además trabaja de payaso, un oficio que le da poco dinero y ningún tipo de seguridad ante la exposición. 
Es el típico payaso que esconde tras su máscara feliz la más profunda infelicidad. En el relato, esa figura se convierte en el símbolo de un movimiento anti establishment luego de que Arthur asesina a dos representantes de ese sector. Es la primera vez que tiene un reconocimiento de esa sociedad que hasta entonces sólo lo expulsaba, y por este motivo él abraza ese personaje.



Detrás del vidrio empañado
Frente al conformismo cristalizado de films de héroes y villanos de ficción deshumanizados, esta película parece inevitable. Todd Phillips se apropia de un personaje de ficción como si lo hubiera descubierto. Predomina en el film una mirada neorrealista, en el contar la vida dura y cruel, en la crónica dramática de la contemporaneidad. Ofrece un relato que parece documento y a la vez poesía.
Arthur es constantemente maltratado, sufre en carne propia la insensibilidad social que castiga al “diferente” cuando está débil,  además padece el descuido del estado que le recorta el tratamiento psiquiátrico, dejándolo absolutamente expuesto ante su enfermedad. 
Las calles de la ciudad de Gotham están llenas de basura, apesta de bolsas apiladas sin que nadie recoja, se ve la humedad del piso y las paredes que dan idea de lo pringoso y sucio, el transporte público sobrecargado de grafittis. Hay un clima de violencia constante.
A lo largo de todo el film prevalece el tono sepia, amorronado, acompaña la turbia vida del personaje y el entorno.


El relato nos mete dentro de la cabeza de Arthur y no siempre somos conscientes de lo que es real y lo que es su imaginación. Esto es finalmente revelado, pero no todas las veces de modo inmediato. La mente perturbada del personaje se narra a partir de una serie de recursos. Uno de ellos es la utilización de los espejos, Arthur se mira todo el tiempo, en estos lo vemos forzar la sonrisa (intenta encajar) o escribir una frase con maquillaje, por citar algunos ejemplos. Otro recurso es la libreta de chistes, con las frases y el trazo alienado de su escritura. Mira un programa televisivo conducido por un comediante (Robert De Niro) con quien sueña le apadrine su carrera de comediante al comienzo del film, y es ahí mismo donde finalmente se consagra, pero como el payaso asesino. Otro recurso son las cartas escritas por su madre a Thomas Wayne, a partir de las cuales Arthur Fleck emprende la búsqueda de su origen. 



Guasón del método
Hay una estrategia en castear para este personaje a actores del método, para meterse en la psicología de un personaje muy popular y con muchas facetas. Las dos actuaciones anteriores también tuvo un trabajo en esa línea, Heath Ledger y Jared Leto. Estos mostraban su lado gangster, agente del caos. El Guasón de Joaquín Phoenix se destaca por representar al personaje en su estado más vulnerable, sus comienzos. 
Sin dudas el actor realiza una labor excepcional, lo deja todo para representar a un Arthur que pendula entre la fragilidad y la sangre fría. El trabajo que realiza desde lo corporal es un elemento predominante del relato, desde ahí busca expresar las emociones del personaje. La presencia del cuerpo macilento le aporta realismo pero también cierta monstruosidad al personaje, los movimientos tipo muñeco de aire de gomería los vemos cuando Arthur se siente liberado, el estirarse hacia atrás y con un cigarrillo en la boca cuando está cómodo en determinada situación. 
De todos modos, resulta excesivo que los actores del método suban y bajen de peso a extremos.


La veo o no la veo

Si te gusta el personaje, la tenes que ver, pero si esperas una película de superhéroes tradicional no es para vos.